Los trasplantes de órganos son una práctica fundamental para diferentesproblemas de salud. Sin embargo, no todo siempre sale bien cuando se realiza este tipo de intervenciones quirúrgicas. El rechazo del órgano es el principal temor que prima en los pacientes, ya que puede darse inmediatamente o gradualmente.
Pese a los estudios de compatibilidad nunca se consigue que el cuerpo acepte en un ciento por ciento los nuevos órganos, por más que la cirugíahaya sido exitosa. Por dicho motivo las personas trasplantadas deben medicarse periódicamente por el resto de su vida.
Sin embargo el rechazo se da cuando el cuerpo no logra adaptarse al órgano “extraño”. Existen tres tipos diferentes de rechazo: el hiperagudo aparece a los pocos minutos después de finalizada la cirugía. Por su parte, el agudo aparece algunos meses después del trasplante, mientras que el crónico desemboca en la pérdida del órgano por el deterioro que provoca el paso del tiempo.
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